10 de octubre de 2012

Rai

Suelo recurrir a "La mala racha" de Galeano para representar de algún modo los momentos de dolor y tristeza. Ahora podría buscar el cuento en cuestión, copiarlo y pegarlo en esta página vacía. Puedo, también, seguir sentada en el sofá buscando el modo de salir del túnel. Incluso puedo entrar en contacto con el mundo mágico y desear con todas mis fuerzas que algún hada generosa balancee su barita y haga desaparecer este último año y, ya puestos, me haga desaparecer a mí también. Puedo pedir a gritos (ahora que está tan de moda) un rescate global de mi persona... Pero ninguna de estas consideraciones tienen que ver con los valores que me han ido inculcando desde que tengo uso de razón. Quizás sea más noble y sensato "versionar" a Neruda y atreverme a afirmar que "puedo escribir los versos más tristes esta noche"... O robarle al amigo Flaco ese corazón que sale por la boca y no deja paso a esperanza alguna. La vida nos pone a prueba, nos regala, para después arrebatarnos... no sólo soy incapaz de encontrar respuestas, sino que, a día de hoy, no me atrevo a formular más preguntas.
Sé que no va a resultar nada fácil enmendar tanto desatino, y menos para mí, que necesito soluciones inmediatas.
Voy a resucitar. Me encantaría decir que lo voy a hacer por mí, pero es pronto para una categorización tan importante. De momento, voy a luchar por ti. Porque jamás imaginé que existiera un amor tan inmenso y transparente. Porque eres, sin duda alguna, el regalo más bonito que me ha ofrecido la vida. Y porque te debo absolutamente todo (uso la palabra "todo" sabiendo lo peligrosos que son los términos que implican globalidad).
También voy a luchar por vosotros, ¿cómo no hacerlo? Me habéis hecho sentir tan querida, que me da vértigo el grado de responsabilidad que puede conllevar ese hecho.
No quisiera extenderme, porque mi cabeza, ahora, tiende a caer en el caos ideológico... pero tampoco quisiera terminar esta entrada sin mencionar a una persona que debiera ser referente de valentía y FUERZA DE VOLUNTAD. Le conozco hace años, le aprecio hace meses y le quiero desde hoy. Me salvó la vida.

3 comentarios:

David dijo...

Puede que sea una categorización importante pero sí deberías hacerla, luchar por ti, porque eres la mejor persona que he conocido en la puta vida. Y de ésta, como de tantas otras, saldrás. Eliminar un año maravilloso por unos cuantos episodios jodidos no es nada justo.
En cuanto a lo que hablábamos ayer, la felicidad y demás... Algún día te darás cuenta de que la felicidad es lo que tú das.
PD. Me gusta cuando hablas de Jose, me gustáis.

Mariajillo dijo...

Gracias Deivid. Por tanto.

Anónimo dijo...

Me tranquiliza leerte. Te quiero, y te necesito... San.