30 de noviembre de 2012

Gracias



Por un año de vivencias únicas, de aprendizaje (siempre siento que sois vosotras quienes me enseñáis a mí). Gracias por hacerme feliz, a pesar de los reveses de la vida. Gracias por existir, auténticas y verdaderas almas valientes. Os adoro. Hasta otra.

PD: "M.José, ¿vos sabés que sos mi ángel de la guarda?"... No Ana, no tenía ni puta idea, ni el valor de confesarte que me has... no sé ni que me has. (Gracias)

Futuro cada vez más jíbaro

 Y estas maravillas pasean por nuestros mundos, y nosotros, casi siempre, ciegos ante tanta belleza. Feliz finde!

PD. Mi alma, mi cabeza, mi todo... en Gaza.

A medida que la distancia
entre el presente y el final se acortan
y el futuro se aclara y se enaniza
y se está un poco harto
de husmear en los residuos del pasado
uno valora y hasta mitifica
la fusión con el cuerpo del amor
y una que otra mirada que atravesó la niebla

aquellos que se aman o se amaron
saben que allí estaba la clave
la negación del acabóse
y por supuesto la vacuna
contra el maldito desamparo

en el futuro cada vez más jíbaro
no figuran feriados ni esperanzas
menos aún llegan explicaciones
de por qué cómo dónde cuándo

el borde lejos ya está cerca
el borde cerca es un despeñadero
hay que aprender a sentir vértigo
como si fuese sed o hambre

Mario Benedetti

27 de noviembre de 2012

Duelos

Estas últimas semanas, caprichos de la vida, me he visto en la necesidad (laboral y personal) de enfrentarme al duelo. Ni cien tratados bastarían para satisfacer la sed de connotaciones que tiene la palabra en cuestión, dejémoslo en que es el proceso de dolor que prosigue a la pérdida de un ser querido. En un sistema en el que nos inculcan la dependencia emocional como punto de partida para la socialización, es prácticamente impensable vivir un duelo sin agonía. Y estamos tan jodidamente condicionados a las normas universalmente asentadas, que -en época de duelo- no debemos sentir calma (ya ni entro en términos como alegría o felicidad). Pero la mente, instigada por agentes estimuladores, -en ocasiones- también se deja llevar por algún acorde oportuno, y permite el paso de imputs determinantes para la recuperación del control que hace tiempo perdiste. Imputs que estrellan camisetas en cualquier esquina, o que viajan a Birmania empujados por la incertidumbre, quizás por el miedo. Que visten de oscuro, tal vez para ocultar un interior ajado pero brillante. Este tipo de encuentros, regalo en días de lluvia, no son más que despertares. Abres los ojos, inundados de vértigo, y te atreves a saborear futuro.
Y ésto son los duelos, compañeros. Vida enfundada en vida.

24 de noviembre de 2012

Tal vez te acuerdes de mí



Hasta aquí, bien. Pero hay acordes que te parten el alma en doscientos pedazos, y te quedas así.

21 de noviembre de 2012

Suárez



Tiempo hacía que no me moría de ganas de plantarme delante de tu guitarra, de tu voz, gallego. Dos días, sólo dos. Feliz.

20 de noviembre de 2012

Una historia con las manos

 
 No me mires cuando mire, sin mirarte entre los poros,
 de tu piel de terciopelo, de la curva de tus fauces,
 mírame cuando repose en el cajón de mis raíces,
 que elegí el papel de mártir por morirme por un beso,
 por el camino maltrecho de la vida y sus compases,
 
 Déjame, que te cuente, una historia con las manos
 que te sepa a caramelo,
 que me estrelle con tu boca, que eyacule en tu barriga,
 que me siembre en tu agujero, que te grite como un cerdo.
 
 Y el escondite del día será un sueño duradero,
 entre sábanas de hojaldre donde dimita mi cuerpo,
 que estoy resudando a chorros, me estoy poniendo blandito,
 se me olvidan los demonios cada vez que estoy contigo,
 que me sabe a libertad, callarme entre tanto ruido.
 
 Déjame, que te cuente, una historia con las manos
 que te sepa a caramelo,
 que me estrelle con tu boca, que eyacule en tu barriga,
 que me siembre en tu agujero, que te grite como un cerdo.
 
 Arranca que tengo tierra en los bolsillos,
 y agüita pá hacerte un castillo de fango,
 debajo de un puente que tengo los dientes,
 pá darte un mordisco cuando te despiertes,
 que importa si es de noche ya.
 
Poncho K 

18 de noviembre de 2012

Fotos

Perderse por Barcelona con la cámara, disparar doscientas veces, llegar a casa y rescatar la mejor foto. 


16 de noviembre de 2012

Si hablamos de que te has ido



"Tiempo de penas no es tiempo perdido" (Pepo)
Feliz fin de semana.

Santiago

Empezaba el curso. Hacía una semana que había regresado de Santiago, patriota hasta las trancas, y huérfana de todo. En aquella época ya comulgaba con alguna idea del partido, más por herencia que por convicción, pero con la fe que exigía compartir su sangre. Allí, aprendí a escuchar, en las calles, en las plazas, en los cafés. Me interesaban, de forma especial, las desventuras de Amanda, una puta que antes había sido bailarina, o al revés, no recuerdo. Fiel a su vestido de franela verde, trazaba las líneas de su pasado entre tequilas y resignación. Amanda consiguió cambiarme -con la habilidad de un trilero en mala racha- a Neruda por Huidobro. Y, así, supe que las golondrinas se cortan las alas cuando están de luto, y que las princesas viven en astros doloridos, lejos de sus enanos. Escuchar a quién tiene algo que decir es un modo de comprender la vida, más como verdad relativa que como agujero negro en medio de la nada. En Chile me enamoré, claro.

Empezaba el curso. Todas las mañanas conducía hasta la facultad, servil y sumisa a nuevos rituales, que pronto se hicieron costumbre y, más tarde, recuerdo. A la altura del mercado de Vía Julia, dejaba que sonara "Vine del Norte", y -con ella- también sonaba el tardío recitar de los que vislumbran el futuro en posos de café, allí, en La Chascona. Llegaba al bar de Mundet, que me perdonen las clases a primera hora, y te miraba, convencida de que me salvarías, sin hablarme, sin saber de mi febril existencia. Hablabas de paradigmas, de soledades... pero nunca conmigo.

Anoche fui a ver a Ismael Serrano, y -como cada vez que lo hago- deseé que no cantara "Vine del Norte". En el segundo bis, el poeta sale -sin su banda- y permanece quieto ante un Palau en silencio, a la espera... "Vine del Norte buscando una canción y una cruz..." No, esta vez no voy a huír, porque en mi hambre, en mis miedos y en mi pena mando yo.

PD. Hace meses (quizá años) que me reclamas una entrada en mi blog. Nada de lo que pueda escribir sería suficiente. Me gustaría volver una mañana a la cafetería de Mundet, David.

15 de noviembre de 2012

Atrapados en azul

Hace veinte años vivías atrapado en el gris,
otro tiempo, otro color,
y te esperaban impacientes en casa,
te habían cogido y nadie sabía si vendrías hoy.
El tiempo ha pasado, las cosas han cambiado,
quizás se respira mejor,
pero corremos delante de los mismos,
y es que pasado el tiempo hay quién no envejeció.
Y es que vivimos atrapados en azul,
atrapados en azul,
atrapados en azul,
ellos me protegen de ti, ¿de ellos quién me va a proteger?
Atrapados en azul,
atrapados en azul.
De día uniformados, de noche encapuchados,
imparten la misma ley.
Lloverán sapos y culebras, lloverán piedras,
y luego os preguntaréis por qué.
Seas rojo, negro o chino,
o si te pasaste de listo, aprenderás tu lección.
Las cámaras nunca recogen lo que sucede en la celda,
entre uno y otro furgón.
Y es que vivimos atrapados en azul,
atrapados en azul,
atrapados en azul,
ellos me protegen de ti, ¿de ellos quién me va a proteger?
atrapados en azul,
atrapados en azul.
Atrapados en azul,
(a por ellos),
atrapados en azul,
(tenles miedo),
atrapados en azul,
ellos me protegen de ti, ¿de ellos quién me va a proteger?
atrapados en azul,
atrapados en azul.
Atrapados en azul,
(madre preocúpate),
atrapados en azul,
(si a tu hijo llegan a coger),
atrapados en azul,
ellos me protegen de ti, ¿de ellos quién me va a proteger?
atrapados en azul,
atrapados en azul. 

Ismael Serrano

14 de noviembre de 2012

No tingues por



Cap agressió sense resposta! Muy hasta la polla del rollo kumbahappyflower. Armas! Ya!

PD. Siempre que hay mani, no falta una llamada de mi padre. Creo que me conoce bien. En eso, nos parecemos demasiado.

12 de noviembre de 2012

Todo empieza y todo acaba en ti

"No voy a pedir perdón por descubrir en ti la luz de mis latidos".  Así comienza la primera canción del nuevo de Ismael. El 12 de mayo fue la última vez que me atreví a escucharla. Entonces vivía sola, estaba sola, y esos versos me ayudaban a justificar la torpeza de mis pasos, perdidos entre mi casa y el mar, entre el mar y cada una de las despedidas que, día a día, me ofrecías en forma de sonrisa. Si mentir es el dulce velo de nuestra consciencia, dejarse engañar suena aún más tentador. Los ojos, fieles a una dueña ciega, cierran sus portales a un mundo de tragos de ginebra.
Podría escribir sobre las horas muertas entre cigarros de liar y billetes de 20, que sería más alentador que recordar el balanceo de mi cuerpo agazapado sobre la tenue esperanza de que alguien me sacara de mí misma.
Y, como dice aquél, " me dan ganas de patear al pasado, cuando veo lo que le ha hecho a mi presente". Despertar es la primera batalla ganada, la que me recuerda que sigo viva entre tanto muerto, la que da paso a nuevas ilusiones, pequeñas, pero nuevas... pequeñas, pero ilusiones.
Hoy, 12 de noviembre, puedo escribir sobre las horas que pasamos arreglando el mundo en el Ateneo. También puedo explicar que el ron ya no es bálsamo para un palpitar podrido e inerte, o que ayer me arropé con el cálido abrigo que es tu cuerpo -vestido de piel-  y mi lengua -enferma de nostalgia-.
Desafiando consejos amigos, he de decir que me gusta Ferreiro, porque -en una de sus canciones- asegura que "la pena dura tanto como quieras tú seguir llorando". Y esa es, campañeros, la clave de casi todo. Entre el casi y el todo estás tú, y tú, y tú... bocanadas de agua para un pez que agoniza en la superficie. Estás tú, que apereces -como un candil- brillando entre la nada.

*A Xavi, que me salvó, y todavía me enseña cosas (perdón por Ismael).

11 de noviembre de 2012

Cold water



Feliz semana.

Beginners

Acabo de verla. Me sumerjo ante las respuestas a todas esas preguntas, un tanto incómodas, que me atosigan durante las noches de insomnio, y -no sé cómo- empiezo a creer que las relaciones personales -y los grandes quebraderos de cabeza que, a veces, conllevan- son bastante más sencillas de lo que nos empeñamos en pensar. Mientras no se demuestre lo contrario, solo tenemos una vida, así que más nos vale tratar de vivirla siendo un poco nosotros mismos y cerca de todas esas personas que amamos. 
¡Vaya novedad! Parece fácil. 

"Para alguien que da consejos sobre relaciones, estás muy solo"
"Ahora tendré que matarte.¿Por qué? Porque me he enamorado de ti"

10 de noviembre de 2012

Pequeñas mentiras sin importancia


"Pequeñas mentiras sin importancia gira en torno a las vacaciones de verano de un grupo de amigos; unas vacaciones vistas no sólo como un acto de escapismo, sino también -y sobre todo- como el ejemplo máximo de su egoísmo. Y es que en esas ganas de pasarlo bien, esa necesidad de que nada se tuerza, de que ni siquiera las comadrejas amenacen la calma del refugio playero, hay mucho de dar la espalda a la realidad, a sus problemas y a los de los demás. Se consuelan pensando que no han abandonado a su amigo hospitalizado porque van a acortar las vacaciones: dos semanas en vez de un mes, y al fin y al cabo sólo estarán a una hora de avión de París".

 Pues sí señores! Así somos los humanos. Nos refugiamos en esas pequeñas mentiras porque es mucho más fácil así, porque mentir -a veces- es un acto inocente. Acostumbramos a mentir a los demás con pleno convencimiento de que es lo mejor para ellos, cuando -en realidad- sólo estamos pensando en nosotros mismos. Y -cuando mentimos- el momento de sinceridad parece lejano, como la costa cuando viajas en proa, olvidando que existen bancos de arena, pérdidas y sucesos imprevistos que te empujarán a mirarte al espejo y ser sincero de una vez por todas. 

Esta joya también se detiene en la importancia del lenguaje, y -sobre todo- del uso que hacemos de él. Maravilloso ejemplo al hilo del cómo decimos las cosas: "Masaru Emoto puso arroz hervido en dos tarros y los cerró; a un tarro le colocó una etiqueta con la frase "Te quiero" y al otro una etiqueta con la frase "Te odio". Día a día, al primer tarro le agasajaba con palabras cariñosas, mientras al segundo le escupía palabras llenas de rencor. El arroz odiado se pudrió enseguida, mientras el arroz amado seguía intacto". No sé si el experimento es cierto o no (igual lo pruebo) pero la metáfora es cojonuda. Qué diferente sería todo si fuéramos capaces de cuidar y mimar a las palabras, a las personas...

8 de noviembre de 2012

Si quieres bailamos

"Si quieres bailamos, me pongo los zapatos y me llevas contigo por ese mundo oscuro y desconocido del compás... Olvidarnos del tiempo perdido" Ya no hay marcha atrás, grandes decisiones, pequeñas victorias. Todo empieza y todo acaba en ti.

7 de noviembre de 2012

Nunca nadie


(Oncle Jack, presentación Acrobática, 06-11-12)

Hoy no voy a ser quien quieres,
no tengo miedo, voy a saltar.
Tus caballos me escupen,
los míos vuelven a frenar.

Nunca nadie supo la verdad.
Voy a morder tus balas,
no voy más lejos,
entiéndelo ya.

Nos miramos con lupa,
el sol viéndote brillar.
Nunca nadie supo la verdad.

Que los vientos no traigan
siempre un nudo en la garganta.
Para ya, ya, ya, ya...
que te vas a quedar en nada,
que te vas a quedar en nada,
que te vas a quedar sin alas...
cuídalo bien.

No voy a soplar las velas,
hoy vengo muerto, quiero gritar.
Los veranos en ruta
me salvan otro año más.
Nunca nadie supo la verdad.

Todos tus pasos son mis alas,
tus anhelos cada una de mis taras,
hay una luz, viene hacia aquí,
cógela al vuelo.

Que los vientos no traigan
siempre un nudo en la garganta.
Para ya, ya, ya, ya...
que te vas a quedar en nada,
que te vas a quedar en nada,
que te vas a quedar sin alas...
cuídalo bien.

Leiva


"Que los vientos no traigan siempre un nudo en la garganta. Para ya! Que te vas a quedar en nada..." (Leiva)
Ya hablaré de esta tarde-noche, si eso.

5 de noviembre de 2012

Y los conserjes de noche



Porque una coma te puede cambiar la vida. Y un acento. Y una llamada a tiempo. De la misma forma que el silencio... Hemos de estar atentos a los pequeños gestos y matices, porque -sin duda- te pueden cambiar la vida.
Presentación del Acróbatas mañana en el Oncle. Dani, Rafa, Leiva, etc, etc... el ayer se desvanece, para dar paso a esa voz que, temblorosa, te susurra al oído: "es una historia que se escribe en los portales, de breve intensidad...".
Feliz semana.

4 de noviembre de 2012

Halloween


Halloween me parece una soplapollez, como la mayoría de "celebraciones". En estos días se respiran los aires envenenados de la voluntad de los que dicen tener fe (así es querido Sagan). No me extiendo. Durante una semana, hemos perseguido pistas, superado pruebas (algunas francamente difíciles)... Hacía meses que mis miedos iban por otros derroteros. Lo de anoche fue la hostia, y conseguir algo así en 70m2 merece mucho más que una entrada en este blog... Estoy enamorada de la ilusión que le echáis a la vida, estoy enamorada de todos vosotros.

PD. El sábado que viene hacemos túnel del terror. 2 eurillos. Las pelas las invertiremos en el Casal d'Infants de La Mina. Veniros!
PD2: Hoy me explico como el culo. Resaca.

3 de noviembre de 2012

Es importante



"Pero lo cambio todo por tus manos quitándome la ropa..."
Aunque les quiero, hace algunos años que me dejó de gustar la música que hacen. Aún así, anoche, ésta fue "la canción". Firmaba por muchas noches así.

2 de noviembre de 2012

El amor difícil

Perdóname por ir así buscándote
tan torpemente…
Pedro Salinas.
 Quizá tú no me viste,
quizá nadie me viese tan perdido,
tan frío en esta esquina. Pero el viento
pensó que yo era piedra
y quiso con mi cuerpo deshacerse.
Si pudiera encontrarte,
quizá, si te encontrase, yo sabría
explicarme contigo.
Pero bares abiertos y cerrados,
calles de noche y día,
estaciones sin público,
barrios enteros con su gente, luces,
teléfonos, pasillos y esta esquina,
nada saben de ti.
Y cuando el viento quiere destruirse
me busca por la puerta de tu casa.
Yo le repito al viento
que si al fin te encontrase,
que si tú aparecieses, yo sabría
explicarme contigo.

Luis García Montero 

Bien Sr. Montero, habrá que ir a escucharle. 


1 de noviembre de 2012