21 de abril de 2023

De sobras sabes..

Que hemos dejado de necesitar(nos) para escoger(nos).

Que incluimos preferir, desear, encantar y lamer al puñadito de verbos que supimos seleccionar con atino y destreza, desde la voluntad y la euforia propia de una noche rosada de vino.

Que el singular se nos queda corto, y el viernes. Y el sabor de después.

Que te espero despierta, o poco dormida, que es lo mismo que despierta. Que sigues siendo la presa que mis sentidos buscan para llenarse de vida.

Que ya no te supongo ni intuyo. Te sé. De memoria. Sé de tus silencios llenos de luz. Sé de las tinieblas cuando agachas la mirada y aprietas los dientes. Sé lo que hay dentro, lo he tocado tantas veces como vueltas da ese disco -tan socrático- que nos mira entre cómplice y compañero.

Que de verdades también nos alimentamos, asumiendo que no todos los platos son dulces.

Sabes del tacto, del juego entre el reborde de la copa y tus labios, de perseguir la tinta de mis tatuajes con los dedos (primero). Sabes poner las cartas que te escribo sobre la mesa y deshojarlas para llenarlas de piel, la mía.

Sabes que quererte es un ejercicio de inmortalidad, y ¿sabes? me gustas de un modo casi obsceno. Me gusta cuando le haces la coleta a Amanda, y le enredas el pelo y las ideas. Me gusta pensarte llegando a la cima con tus amigos. Me gusta que seas valiente, y vulnerable. 

Sabes que reduces los miedos a migajas, y multiplicas la alegría por cientos de banquetes cocinados por nosotros mismos. 

De sobras sabes que eres.

Y que no miento si juro. 

Abril, 2023.